RESUMEN

Se analiza la contribución que los últimos estudios relacionados con el modo de golpear‑recibir, han permitido comprender la coordinación entre los sujetos y su entorno, según la perspectiva de la psicología ecológica. Las pruebas realizadas con jugadores de Tenis de mesa de elite, demostraron que la realización eficaz de un golpe directo de ataque está gobernada por una conexión sutilmente proporcionada entre percepción (momento del contacto) y acción (aceleración).

En el primer experimento descrito sobre la recepción se efectuó una manipulación directa e inmediata del esquema de dilatación óptica de la pelota cuando se acerca, utilizando una pelota deshinchable. Las acomodaciones de la abertura de la mano según los diferentes tamaños de la pelota ‑especialmente las acomodaciones de la mano a la pelota deshinchable‑ apuntan no sólo a la conexión percepción‑acción sutilmente proporcionada, sino que también indican claramente que tal conexión se basa sobre la información del momento del contacto. El aprendizaje representa la dirección de la atención. Esta se refiere a la comprobación de la información que se debe descubrir. En los jugadores de Tenis de mesa novatos que están aprendiendo tal habilidad, la adquisición revela que los cambios interesan, no tanto a las pautas de los movimientos efectuados, cuanto a la armonización de sus acciones frente a las informaciones visuales específicas. Aprender a golpear una pelota cuando sólo el movimiento de ésta resulta visible, provocaba mejores resultados en las condiciones de luz total, ya que quien recibía, ponía su atención en las fuentes informativas y especialmente en las informaciones espacio‑temporales de la pelota. Todo esto implica que el proceso del aprendizaje puede explicarse como la afirmación de una conexión, específica de la destreza, entre percepción y acción.